La gastronomía (del griego γαστρονομία), es el estudio de la relación del hombre con su nutrición y su medio ambiente o entorno. El gastrónomo es el profesional que se encarga de esta ciencia.
Generalmente se piensa erróneamente que el vocablo gastronomía solo tiene correlación con el arte culinario y los cubiertos que se ponen en la mesa. Sin embargo, ésta es una pequeña parte del campo de estudio de dicha disciplina: no todo cocinero es un gastrónomo, ni todo gastrónomo es cocinero.
La gastronomía también estudia diversos elementos tomando como eje central la comida. Aunque la palabrita suena algo glamorosa y mete su poquito de temor a algunos, es bueno adentrarse en su concepto para conocer sus secretos: sabores, olores… y deslices, que como en todo, los hay y bastantes.
PECADITOS GASTRONÍMICOS
Dice un viejo adagio español que “Todo el mundo tiene boca y, por tanto, se equivoca”.
- Fumar en la mesa.
Antes era un hábito y todos lo hacían, pero ahora es considerado un pecado capital de la mesa.
Si ofrece una cena, no coloque ceniceros para que el mensaje sea bien claro.
- Hongos de lata.
Si no los consigue frescos, no los incluya en su menú.
No hay manera de disfrazarlos, los hongos enlatados tienen ese sabor característico de los productos conservados, mezcla de metal y químicos.
- El vino en el congelador.
A veces, en el afán de enfriar rápido un vino que está “al tiempo”, se acostumbra introducirlo en el congelador para acelerar el proceso, pero se podría congelar si es olvidado o enfriar demasiado para el gusto general.
La mejor forma de enfriar el vino es poniendo cubos de hielo en una cubeta; luego agregar agua muy fría hasta cubrirlo y añadir una cucharada de sal.
Rápidamente meter en esta mezcla las botellas de vino.
- Picadas y boquitas antes de la comida
Cuando los invitados comienzan a llegar, es común ofrecer bebidas y boquitas para mantenerlos entretenidos hasta el comienzo de la comida.
No se exceda con demasiadas viandas, pues el efecto podría ser contraproducente, haciendo que los comensales pierdan el apetito.
- Cortar los espaguetis con el cuchillo
En ocasiones cuando los espaguetis son algo largos, hay la tendencia de cortarlos con el cuchillo como si se trataran de trozos de carne o de pollo.
Los espaguetis se envuelven en el tenedor girándolo suavemente hasta que lo circunden y queden sin extremos colgando.
- Colocar kétchup en la mesa en una comida formal…o pedirlo
Esta popular salsa es para algunos casi como el agua: no pueden comer sin ella y hasta parece que es “el vocero de información” de muchos platos.
Pero aunque así sea, no la coloque en su mesa junto a sus alimentos.
Si un invitado la pide, yo prefiero decir que no tengo; de hecho, no tengo porque no me agrada.
- Ubicar palillos en la mesa
Este es el rey de los pecaditos en la mesa.
Es completamente innecesario, ya que los palillos no se usan mientras se está en la mesa.
Si cuando come siente una molestia en sus dientes, pida permiso con discreción y vaya al baño. Nunca trate de arreglarla en la mesa con los dedos o con un palillo, ni siquiera tapándose con las manos, costumbre esta de muy mal gusto adoptada por algunos.
Como ven, hay muchas razones para estudiar estos temas, ya que de lo contrario es muy fácil equivocarse.
Por: Penny de Henríquez