Empecé trabajando con mi madre y su mayor anhelo era tener una hija abogada,  Fue la vivencia, que marcó a nuestra entrevistada Julissa Carrizo quien nos habla sobre su vida profesional y otros datos de interés.

Son 15 años que tiene de estar dedicada el derecho y al proceso con clientes que tienen interés en comprar una propiedad por todo el país.

P:. ¿Qué nos puede decir de esta actividad?

R: Tengo 22 años que abrí mi bufete Carrizo & Asociados, también tengo una empresa de Bienes Raíces que abrimos en el 2004,  hace 18 años, asesoramos a los clientes con las propiedades, contratos  de venta, hipotecas con los bancos y los pagos de impuestos.

P: También en el campo profesional ha estado a cargo de sociedades anónimas, sociedades de responsabilidad limitada, fundaciones, litigios civiles, registro de naves y elaboración de cuentas. Amplíenos más sobre estos procesos y cuál es el que causa mayor curiosidad.

R: Mi madre inició un negocio en 1991, llamado Servicios Notariales, y desde chica me tocó vivir todo el ambiente de Sociedades Anónimas, compra ventas, testamentos un negocio en el que entré a trabajar con ella a mis 15 años y tengo toda la experiencia, ya que tuve a la mejor maestra mi madre, a quien le debo haber estudiado y ser abogada.

P: Háblenos un poco sobre usted.

R: Soy una mujer creyente con una fe inmensa, que todo lo que me propongo lo logro, me encanta meditar, hacer “full” ejercicio, soy una mujer fitness. Me ejercitó desde los 16 años, BBL (Brazilian Butt Lift) y socia de Power Club desde que abrió.

P: ¿Qué le agrada hacer en su tiempo libre y algunos de sus pasatiempos?

R: Tengo una casa en Boquete y Cerro Azul. Entre mis hobbies, viajar, montar bicicleta, jugar bolos y me encanta la lectura, tengo en mi oficina una biblioteca con más de 2,000 libros, que considero mi pequeña Alejandría.

Desde que conoció a su esposo siempre han sido una dúpleta en lo personal y profesional. ¿Qué nos puede comentar al respecto?

Una mujer enamorada de mi esposo John Almillategui, mi cómplice, mi asesor gratuito y juntos trabajamos en muchos proyectos.

Nuestra entrevistada es como un reloj 24/7, pues divide su tiempo entre trabajo, deportes, meditación, llevar a su hijo a juegos de fútbol, karate y así como pasar tiempo con su familia. También considera que no hay nada más gratificante que sus otros seres queridos, “ellos son mi ejemplo a seguir mis héroes  los Carrizo Diez, mispadres, juntos formaron un hogar de 4 hijas, siendo yo la tercera. Desde chica fui muy independiente iba a los 16 años a la escuela con carro, supongo que manejaba bien porque aprendí sola”, nos dice con la mirada puesta en un pasado lleno de luminosos recuerdos.

P: Le interesa la ayuda en las personas en la tercera edad. Coméntenos de la fundación que preside.

R: Soy la presidenta de La Fundación Asistencial de Ancianos, sin fines de lucro que creé en el año 2006, y que se dedica a prestar ayuda a los Ancianos con necesidades y enfermedades y muchos que han sido abandonados.

P: ¿Cómo surge Carrizo y Asociados?

R: “Iniciaría diciendo que cursé mis estudios primarios y secundarios en María Inmaculada, luego me gradué de abogada, posterior hice mi maestría en Derecho Procesal Penal y actualmente me encuentro  a obtener mi doctorado.

Cada día  trabajaba en la Empresa de mi madre, desde los 15 años, por eso en  el futuro quería ser abogada. En el año 2000 decido abrir Carrizo & Asociados, hace 22 años, sin clientes, sin dinero fue una aventura y ha sido la mejor aventura de mi vida, porque estudié lo que me gustaba y trabajó en lo que me gusta, empecé siendo la recepcionista, la de limpieza, secretaria, pasante y abogada. De esa manera inició  mi historia, fui captando clientes, y así año tras año fui creciendo, hasta llegar un bufete con más de 10 empleados.

Soy la única dueña del bufete desde hace 22 años. Tramitamos todo lo referente al Derecho Penal que es mi especialidad, temas migratorios, civil, Comercial, marítimo, familia de todo un poco tenemos especialistas a lo que necesite el cliente”, lo que demuestra esa energía comparable al sol de cada día ir a trabajar algo que la hace ser una persona inmensamente feliz.